feb
22
2014
Érase una vez un ciudadano llamado Enrique Alonso Pais. Lo conocí en 1995 como presidente de Asociación de Vecinos de San Andrés de Comesaña, parroquia de Vigo, en mis labores como alcalde de esta ciudad.
Ese ciudadano tenía su historia laboral en el metal, astilleros, clase obrera, con un pasado sindical en CCOO. Era amigo de Manuel Pérez, alcalde de Vigo representante del PP que me sucedió en junio de 1995. Manuel Pérez y su gobierno adjudicaron el mantenimiento y la conservación de jardines, contrato plurianual, a una empresa nueva en Vigo: CESPA, y, vaya casualidad, el señor Alonso Pais pasa de obrero de astilleros a gerente-delegado plenipotenciario de la contrata municipal de jardines, CESPA.
Más tarde, el ciudadano Alonso Pais decide volar solo. Tras fracasar en ganar la contrata de limpiezas, quizás porque había cambiado el gobierno municipal, compra, por llamarlo de alguna forma, una vieja empresa de obras de la provincia que no había tenido mucho éxito. El ciudadano Alonso Pais convierte a la constructora Eiriña en una pujante contratista de obra pública: más de 15 millones de euros en el Concello de Vigo, cantidades más modestas en administraciones gobernadas por el PP como la Diputación de Pontevedra, Puerto de Vigo, Zona Franca, Concello de Nigrán. También consigue contratos en lugares gobernados por el BNG como el Concello de Pontevedra, donde casualmente también CESPA hace la recogida domiciliaria de la basura y la limpieza viaria. El ciudadano Alonso Pais además colocó a su hijo en la contrata de jardines que realiza CESPA para el Concello de Vigo, y también, como hay familias con suerte, su hija consigue ser concejala de Vigo en la lista del PP.
El ciudadano Alonso Pais conoció en el movimiento vecinal a Ángel Rivas, ahora concejal del PSOE en Vigo en el Concello de Vigo y cuyo despacho fue registrado en el marco de la Operación Patos. Fíjense que casualidad que hasta junio de 2012 fue director general de Hormigones Valle Miñor, empresa que suministra el hormigón de todas las obras que hace Eiriña para el Concello de Vigo. El ciudadano Alonso Pais, ahora imputado, comparte un conocido con don David Regades, casualmente el otro concejal del PSOE en Vigo que vió su despacho registrado por la policía judicial. Ese conocido en común se trata de un viejo liberado de UGT, dirigente de la federación del metal, vecino de San Andrés de Comesaña y, casualmente, fan de don Abel Caballero, doña Carmela Silva y don David Regades en el PSOE vigués, donde su voz suele defender al trío que nos gobierna.
Verán que en esta ciudad hay demasiadas casualidades, pero una pequeña élite tiene estrella y la gran mayoría vive estrellada por la élite. ¿Son probables tantas casualidades?, la fiscalía de Vigo piensa que sí. Yo no me lo creo, por eso lo escribo, para que ustedes sepan lo que otros o no saben, o no cuentan o no les quieren contar.
Ustedes decidan. Ayuden a hacer democráticamente el cambio para que la policía no vuelva a entrar en nuestras instituciones por meras casualidades. Buena suerte.